Glaciares

Diputados: fracasó la sesión para tratar la ley de protección de los Glaciares

El oficialismo no bajó al recinto, mientras que al arco opositor le faltaron siete integrantes que habían comprometido su presencia. Al salir de la Cámara, Carrió apuntó contra los ausentes que se encuentran “paseando por Europa” y Bonasso denunció que “hay un juego muy sucio” que involucra a las “mineras” y “algunos gobernadores”.

La sesión con que la Cámara de Diputados iba a reanudar su actividad en el recinto tras el receso invernal fracasó hoy por falta de quórum y quedó sin conclusión el tratamiento en particular del proyecto de ley para la protección de los Glaciares, que era el tema principal de la jornada.

La sesión fue levantada con 127 diputados en el recinto, dos menos de los 129 que exige el quórum, a propuesta del jefe del bloque del Frente para la Victoria, Agustín Rossi.

El oficialismo no bajó al recinto, contrariado por los cambios al proyecto para proteger los Glaciares que el 14 de julio último negociaron al filo de la última sesión de la Cámara el presidente de la Comisión de Medio Ambiente, Miguel Bonasso (Diálogo por Buenos Aires), y el senador kirchnerista Daniel Filmus.

Al arco opositor le faltaron siete diputados que habían comprometido su presencia para hacer quórum: Laura Alonso y Christian Gribaudo (PRO), Nélida Belous (SI- Tierra del Fuego), Zulma Daher (Peronismo Federal), Ricardo Gil Lavedra (UCR), Carlos Heller (Encuentro Social) y Gerardo Milman (GEN).

Tras levantarse la sesión, la presidenta del bloque de la CC, Elisa Carrió, salió visiblemente ofuscada del recinto.

"La Coalición Cívica estaba con todos sus diputados y no puede ser que haya diputados paseando por Europa y nosotros tratando de sesionar aquí", se quejó Carrió, al hablar con periodistas en la cámara baja.

Bonasso, más que molesto, tuvo un cruce en el Salón de Pasos Perdidos con Silvia Vázquez, quien estaba ofreciendo una conferencia de prensa con representantes de los pueblos originarios que no pasó a mayores.

El diputado luego dijo a la agencia de noticias DyN que "cada vez que se trata un tema ambiental que implica temas económicos este fenómeno se reitera. Es como un fenómeno meteorológico" y recordó que una situación similar se dio con la Ley de Bosques, que se votó en general en 2006 y terminó de sancionarse en particular en marzo de 2007.

Bonasso atribuyó el fracaso de la sesión para tratar la Ley de Glaciares a la presión o "lobby" de las mineras y el mandato de gobernadores que no quieren "que se aprueben los artículos 6 y 7 y el 15" del proyecto, que va contra el interés de sus explotaciones.

El legislador por la ciudad de Buenos Aires estimó que "acá hay un juego muy sucio. El lobby lamentablemente acá no esta institucionalizado, hay lobby de las mineras, con la obediencia debida a algunos gobernadores".

Bonasso también repudió la "actitud provocativa de Rossi" en el recinto y el "acatamiento servil del presidente de la Cámara", Eduardo Fellner, quien finalmente levantó la reunión.

"En términos reglamentarios podía tener razón" porque no había quórum, también -admitió- por responsabilidad opositora ya que reconoció que "no quedan dudas que los diputados de la oposición, particularmente Vázquez, estaba haciendo declaraciones a la prensa" en vez de estar en el recinto. Bonasso defendió el acuerdo con Filmus, pero insistió en que "el miedo del oficialismo y de sus aliados es precisamente el acuerdo, es precisamente que esto se convierta en una ley y la Presidenta se vea obligada a cumplir lo que se dijo, que es que si había ley no la vetaría".

El proyecto de ley prohíbe en los Glaciares y su periferia "la liberación, dispersión o disposición de sustancias o elementos contaminantes, productos químicos o residuos de cualquier naturaleza o volumen".

También veda específicamente "la exploración y explotación minera e hidrocarburífera" y la "instalación de industrias o desarrollo de obras o actividades industriales".

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